LA HISTORIA DEL GATO
Durante la época de los 60s, Viña San Pedro ya era reconocida por la calidad de sus vinos, en ese entonces, solo tintos y producidos de forma íntegra en nuestro país. En ese mismo período llegan a Chile los enólogos alemanes Ignacio Lauterbarch y Klaus Schroder, quienes comenzaron a perfeccionar la producción desarrollando viveros propios, que dieron como resultado el nacimiento de una de las marcas de Viña San Pedro mundialmente conocidas en la actualidad.
Una fábula Alemana cuenta la historia del “Schwartze Katze”, un gato negro de lomo erizado que era el encargado de cuidar una barrica de vino originario de la zona en torno al río Mosela. Fue esa historia la que inspiró a Guillerno Stein, quien decidió otorgarle a los vinos de la Viña San Pedro la imagen de este felino.
Poco a poco, la imagen se popularizó junto con la calidad de cada una de las cepas de vino tinto, convirtiendo a este tierno animal en un verdadero símbolo, y que hoy está presente en las botellas que se venden en más de 70 países.
